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martes, 11 de noviembre de 2008

El origen perdido

EL ORIGEN PERDIDO
Autor: Matilde Asensi
Editorial: PLANETA
Fecha de publicación: 4/09/2003.
Edición: 1ª.
Número de páginas: 525.


Arnau lleva una doble vida. De dia es un importante empresario, dueño de una empresa informatica que hizo de la nada. De noche, es Root un hacker, que junto con sus amigos (y a la vez empleados) Marc (alias Jabba) y Lola (alias Proxi) se cuelan en ordenadores ajenos para dar una leccion a quien se lo merece. Pero la vida de Arnau da un giro inesperado cuando Daniel (pronunciado como en ingles, debido al origen de su padre), su medio hermano, enferma de repente. Los sintomas que padece Daniel son muy extraños, sobre todo en conjunto, y tienen mas que ver con enfermedades mentales: No recuerda nada del pasado y cree que esta muerto. La preocupacion por su hermano, lleva a Arnau a averiguar que estaba haciendo cuando le ocurrio esto, y mediante su cuñada, empieza a saber que estaba trabajando en una investigacion de la universidad, donde trabajaba en el departamento de antropologia. Concretamente en un estudio sobre los Incas, y las culturas previas, asi como sus idiomas, sobre todo el aymara, del que se cree es el idioma perfecto y primigenio... Poco a poco empiezan a sospechar que la investigacion de Daniel tiene que ver algo con su repentina enfermedad, y Arnau con la ayuda de sus amigos, empieza a seguir la investigacion de su hermano, lo cual les llevara a hacer increibles descubrimientos sobre un lenguaje capaz de "programar" a las personas...


Matilde Asensi nació en Alicante. En 1999 publicó su primera novela, El salón de Ámbar, que ha sido traducida a varios idiomas. Con su siguiente novela, Iacobus (2000), se situó en los primeros puestos de las listas de libros más vendidos, pero fue El último Catón (2001) la que la confirmó como la autora de su generación de mayor éxito de crítica y público. Posteriormente, con El origen perdido (2003) Matilde Asensi reinventó la novela de aventuras. Y en Peregrinatio (2004), recuperó a los protagonistas de Iacobus para realizar un viaje por el Camino de Santiago. Todo bajo el cielo (2006) llevó a sus lectores a la China del Gran Emperador y Tierra firme, su novela más reciente, inicia una serie de aventuras protagonizadas por Catalina Solís, también conocida como Martín Ojo de Plata. Ha sido finalista de los premios literarios Ciudad de San Sebastián (1995) y Gabriel Miró (1996) y ha obtenido el primer premio de cuentos en el XV Certamen Literario Juan Ortiz del Barco (1996), de Cádiz, y el XVI Premio de Novela Corta Felipe Trigo (1997), de Badajoz.

Quizá la forma de escribir de esta autora no sea la más pulcra pero es sencilla y con abundantes pinceladas de ingenio. Esta entretenida novela de aventuras nos lleva desde un espacio muy informatizado (quizá demasiado) hasta el antiguo imperio Inca, desvelando a los ineptos en el tema, como yo por ejemplo, interesantes datos sobre aquella civilización. Confieso que, al principio, cuando he comenzado a leer términos como: aymaras, quechuas, Tiahuanaco, Viracocha…me he preguntado ¿Dónde me he metido? Pero esa impresión se ha disipado enseguida. Elabora un curioso “cocktail” mezclando dialectos ancestrales con lenguajes de símbolos del mundo computacional. También nos muestra una situación, cuando menos, poco común: la reacción de unos urbanitas consumados ante la brutal inmensidad de la selva amazónica, cosa que nos hace reflexionar sobre lo poco que somos cuando nos faltan esos “pequeños detalles” a los que estamos acostumbrados. Hay algunas inverosimilitudes, es cierto, pero recordemos que se trata de una historia de ficción y, sin ambages, me gusta que estén (a menudo busco este tipo de lectura para evadirme un poco de la realidad). El talón de Aquiles se lo he encontrado en que esta señora vuelve con las grutas y laberintos misteriosos en los que hizo hincapié en obras anteriores. No obstante, este último punto negativo que añado no basta para quitarle el aceptable saborcillo que me ha dejado la novela en su conjunto.



1 comentario:

Liberto Brau dijo...

Gracias por tu generosa lectura y regalarnos tus comentarios... se agradece en el alma (como lector).